Desde hace más de 2000 años, los conocimientos de la tradición china sobre los beneficios y el cultivo de los hongos medicinales son únicos. Incluso en la actualidad, los cultivadores chinos siguen produciendo los hongos más nutritivos. El cultivo se ha perfeccionado hasta tal punto que los hongos cultivados no tienen nada que envidiar a sus antepasados silvestres. Nuestros hongos proceden de Fujian, en el condado de Gutian, la región más famosa del mundo por sus hongos medicinales. La empresa agrícola con la que colaboramos cuenta con la certificación ecológica de la UE y concede gran importancia a los métodos de cultivo naturales y tradicionales. Los hongos se recogen a mano de julio a octubre para aprovechar al máximo el contenido de sus ingredientes.
Los hongos están formados por el cuerpo fructífero superficial y el micelio, principalmente subterráneo. Los ingredientes importantes del hongo se concentran en el cuerpo fructífero superficial. Aunque los productos procedentes del micelio subterráneo son mucho más económicos, ya que son mucho más rápidos y fáciles de cultivar, apenas contienen ingredientes valiosos. Por ello, nuestros polvos y extractos de hongos se obtienen exclusivamente de todo el cuerpo fructífero del hongo, incluido el tallo, y contienen toda la riqueza de sus valiosos ingredientes.
Algunos de los componentes más valiosos de los hongos medicinales son los polisacáridos de los hongos, en particular los beta-1,3- y beta-1,6-D-glucanos. Nuestros extractos de hongos reúnen estas sustancias en un rico concentrado. Se extraen siguiendo el método tradicional, únicamente con agua y bioalcohol, el proceso de extracción más puro y delicado. Por ello, no contienen residuos tóxicos de disolventes químicos (como acetona, n-hexano o metanol).