El molibdeno es un oligoelemento esencial que se encuentra principalmente en alimentos de origen vegetal como cereales, frutos secos y legumbres. Las vísceras y los huevos, así como el agua potable (dependiendo de la región) también contienen cantidades significativas del oligoelemento. Sin embargo, la concentración de molibdeno en las plantas depende en gran medida del contenido de molibdeno del suelo y de los factores medioambientales. El cultivo intensivo del suelo o el procesamiento industrial intensivo de los alimentos están relacionados con la reducción del contenido de molibdeno en los alimentos.
El organismo humano puede contener entre 8 y 10 mg de molibdeno. Aproximadamente el 60 % se encuentra en el esqueleto y el 40 % en los riñones, los pulmones, el hígado y la piel. El molibdeno es especialmente necesario como cofactor de numerosas enzimas hepáticas.
Declaraciones de salud relativas al molibdeno (según la EFSA):
El molibdeno contribuye a:
- el metabolismo normal de los aminoácidos que contienen azufre.